GODZILLA 2000, 1999

GODZILLA 2000


Al borde de terminarse el milenio, en 1999, volvió Godzilla a los cines nipones, con una película realmente rara.

Rara en el sentido de que el argumento no es nada del otro mundo, y es bastante lenta, predecible y aburrida. En general la historia que nos cuentan es mediocre y pobre.

La producción, con un costo de 8 millones de dólares, está bien hecha, tiene buenas maquetas, y efectivos efectos especiales cumplen con su misión, y Godzilla pues está bien.

El problema, repito, es una trama super-simple. Del fondo del mar de Japón aparece un platillo volante enterrado hace 60 millones de años, y al que desenterrarse comienza a volar y tal, y de paso toma muestras de ADN de Godzila, y de su gen regenerador, el G1, y crea un monstruo que tiene ADN de Godzilla, es mas grande, mas feo y mas cabrón.

El bicho se llama Orga, y en una escena desencaja la mandícula como las pitones o anacondas, cuando engullen una gran presa, para tragarse enterito a... ¡Godzilla!

El film, si bien cumple técnicamente tiene una de las historias mas sosas, prescindibles y aburridas de la franquicia de Godzilla.

Solo para muy amantes del kaiju Eiga o que quieran presumir que se han visto TODAS las pelis del legendario monstruo radioactivo japonés, Godzilla.