De nuevo tenemos a Jean Rollin haciendo un film de terror bastante curioso pero que desaprovecha mucho sus posibilidades internas respecto con el argumento. Unos campesinos francesos (muy franceses no cabe la menor duda) son contaminados por una mierda que los vuelve homicidas. Total que una joven va a parar recombolescamente a un pueblo lleno de esos pirados llenos de llagas y pústulas supurando pus que la quieren convertir en comida para los pollos. Bueno, vemos una agraciada fotografía, buenos planos, algunas escenass gore destacadas como la de la decapitación, algún desnudo, etc... No pasaría de ser un film MUY DEL MONTON sino fuera porque fue dirigido por el incombustible Jean Rollin y que en el tramo final sale en algunas secuencia (y no en pelotas osea que no veréis ni mostrar una tetita o el culito) a la actriz porno francesa Brigitte Lahaie increíblemente desaprovechada. Ese es el olor general de este queso francés, que nos han dado queso por liebre, y que este film con un guion mas atrevido y con mas densidad, personajes mas desarrollados, Brigitte haciendo de pervertida o ninfómana (ya que esta en el campo se lo podría montar con zanahorias o en plato de alegres pepinos) y mas sangre, hubiera sido un film muy interesante. El film es un quiero pero no puedo en mayúsculas. En el fondo se deja ver, pero realmente no merece mucho la pena perder el tiempo en ver algo tan olvidable.
