Un viejo film de terror francés en el que unos afectados por unas radiaciones nucleares van siendo recogidos y almacenados en un edificio sin vida y lleno de espacios vacíos. Los afectados a la par de que van perdiendo toda clase de recuerdo padecen tremendos dolores de cabeza y encima les dan ataques homicidas matando sin piedad. Esos desgraciados afectados son capturados y vigilados por una siniestra organización secreta que no tiene reparos en matarlos sin hace falta, e incluso carbonizarlos vivos en un horno crematorio, tras haber sido paralizados los infelices con una inyección. No esperéis aquí grandes escenas de acción y terror, o muy elaboradas, sino que es una producción modesta, pero que oculta bastante bien sus limitaciones.
El film tiene una fotografía destacable de Jean-Claude Couty, y hace un uso inteligente de los espacios vacíos y de la ausencia de personas en el entorno urbano, para crear una sensación de claustrofobia y de aislamiento con el espectador que se consigue de sobra.
El film posee numerosos desnudos y escenas eróticas, siendo la estrella y protagonista la bella rubia francesa Brigitte Lahaie, una ex-extrella porno de los años 70. Una actriz de hardcore mítica y recordada por su cuerpo lleno de curvas y sus grandes pechos, ademas de una cara morbosa que mezclaba belleza e ingenuidad. La chica protagonizo numerosos films en los 70, haciendo de todo, incluido anales y dobles penetraciones, y no se cortaba un pelo. Ella es una caso especial, porque es probablemente la actriz porno que con mas éxito se paso del hardcore al cine convencional, protagonizando numerosos films en Europa. Ya madura participa en una programa de radio, como experta sobre temas en torno a la sexualidad. Aqui Lahaie, con unos hermosos 25 años, se nos muestra una actriz aceptable dentro de lo que cabe y de una gran belleza. Jean Rollin hace su particular delirio entre terror, con toques de gore (la famosa escena de las tijeras en los ojos), tiroteos, desnudos, etc... Al final es poética la escena de la mujer ya zombie y su amado lobotomizado de un disparo, cogidos de la mano y caminando hacia la gran ciudad, hacia ninguna parte... La película, de bajo presupuesto, no es nada del otro mundo, pero se deja ver, y entre la belleza de Brigitte y la sensación de irrealidad del film, tiene un cierto poder de fascinación. Cosa que ya es mucho y difícil de conseguir. Un film bastante apreciable según como se mire. Os dejo algunas fotos CENSURADAS de Brigitte Lahaie en sus mejores momentos profesionales en el mundo del cine para adultos.
