Secuela de Kriminal, de Umberto Lenzi, ahora coproducido por España y encima con guion español de Eduardo Manzanos. Se reunió al mismo dúo protagonista: el actor holandes Glenn Saxson y a la bellísima Helga Line, que afortunadamente tiene mucho mas protagonismo y minutos en la producción.
Ahora Kriminal busca unos budas de porcelana que encierran partes del mapa con el cual encontrar un valiosos tesoro en unas ruinas antiquisimas.
La película baja muchos puntos respecto con el original en todos los sentidos, y queda como una floja copia sin mucha alma y que siendo honestos, no entretiene demasiado. Se nota la falta de Lenzi y de un guionista con mas sangre en las venas, porque este film, comparado con su original del tebeo, parece un vaso de leche en una taberna de duros cowboys emborrachándose con whisky. PRESCINDIBLE y sin nada que destacarle. Con todo una secuela innecesaria.
